El Centro Interdisciplinario de Estudios de la Facultad de Ciencias Económicas de nuestra Universidad (CIEFCE), elaboró el informe Nº4 de temas coyunturales. El trabajo remarca que la coparticipación real remitida a los municipios entrerrianos cayó un 7,66% en los primeros siete meses del año (informe elaborado en base a datos del Ministerio de Economía, Hacienda y Finanzas y de la Contaduría General de la Provincia de Entre Ríos).
Las finanzas públicas y el rol de los gobiernos locales
Los gobiernos locales constituyen una red de contención social y resolución de demandas de los ciudadanos cada vez más requerida. La cercanía con los problemas de la población y el conocimiento práctico que detentan los órganos municipales los ubican en una posición inmejorable para atender problemáticas de la más diversa índole. En finanzas públicas, esta situación se recoge en el principio de subsidiariedad fiscal. Según el mismo, es deseable que las decisiones se adopten en el nivel más próximo posible al ciudadano: ello es una forma transparente y práctica de resolver los problemas. Ahora bien, para que esto sea viable las comunas deben contar con recursos suficientes. En el caso de Entre Ríos los entes municipales juegan un rol altamente significativo, no sólo en las tradicionales funciones de alumbrado público y limpieza de la ciudad, sino también, y especialmente, en acción social, promoción económica y prestación de servicios a los vecinos (en algunos casos, los municipios administran comedores comunitarios, centros de salud y jardines maternales).
Existen en la provincia 78 municipios legalmente reconocidos, en los que habitan 1.144.842 personas (el 93% del total de entrerrianos). Sólo 4 de esos municipios concentran el 45% del total de habitantes de la provincia, mientras el 57% de los mismos cuenta con menos de 5.000 pobladores. El gasto público del total de las comunas entrerrianas alcanzó en 2015 casi siete mil millones de pesos, lo cual representa el 19% de las erogaciones del sector público provincial.
A su vez, trabajan en los municipios más de 24.300 personas, lo que significa un 27% del total de empleados públicos del Gobierno provincial. La relación gastos-empleo muestra que las comunas son intensivas en uso de mano de obra, debido al tipo de servicios que prestan.
Los municipios se financian principalmente con recursos extra jurisdiccionales (nacionales y provinciales), que representa el 59% de los ingresos, mientras que la recaudación propia (tasas, derechos, contribuciones) constituyen el 41% de los ingresos corrientes.
Evolución de la coparticipación de impuestos a los municipios entrerrianos
Conforme la Ley Provincial Nº 8.492, en el marco de la Constitución Provincial del año 2008, los municipios de la provincia (en su conjunto) tiene garantizado el 16% de los fondos que la Nación remite a la Provincia en concepto de coparticipación federal de impuestos, y un mínimo del 18% de los recursos tributarios de origen provincial. A eso se le suma, desde marzo del 2009, el Fondo Federal Solidario (FFS), que representa un 30% del monto que recibe la provincia por parte del gobierno nacional en concepto de los derechos de exportación del complejo oleaginoso ligado a la producción de soja. En este año 2016, los ingresos municipales no han escapado al contexto recesivo que ha socavado las finanzas de la Nación y las provincias. Según el INDEC, la caída interanual en el nivel de actividad económica del segundo trimestre de 2016 alcanzó un 3,4%, mientras la tasa de desempleo se ubicó en el 9,3%. La recaudación nominal del Estado provincial y nacional ha crecido por debajo de la evolución del nivel general de precios, con lo cual se ha verificado una caída en su capacidad adquisitiva.
La recesión económica, a la vez que redujo los ingresos públicos en términos de poder de compra, aumentó las demandas sociales derivadas de la pérdida de empleos y la merma en los ingresos de la población.
En tal escenario, en el caso de los municipios entrerrianos los ingresos reales disponibles vienen sufriendo una merma significativa a lo largo del año. Si se compara la coparticipación nacional y provincial recibida por el conjunto de los municipios de la provincia en el período enero a julio de 2015 en relación a la recibida en igual período del año 2016, todo a precios constantes de julio de 2016, los ingresos recibidos por los municipios muestran una caída interanual del 7,66%. En efecto, medida en poder adquisitivo de julio de 2016, la coparticipación a municipios alcanzó los $2.951.734.575 en el lapso enero-julio del año 2015, mientras que en igual período de 2016 la coparticipación sumó $2.725.710.413: en poder de compra los municipios perdieron 226 millones de pesos en ese período (a precios de julio/2016, estimado en base al Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires -IPCBA-).
La evolución del FFS muestra una tendencia muy similar, con una baja acumulada del 5,16% (media a precios de julio de 2016/ IPCBA). La situación de los entes municipales se ve aún más complicada si se considera que la mayor parte del gasto local consiste en pagos de haberes, teniendo la responsabilidad de sostener una importante fuente de empleo en la provincia, y que además invierten en materiales de construcción para arreglo de calles y edificios, cuyos precios crecieron por encima del promedio. En definitiva, la información muestra que los municipios se encuentran en el corriente año con menores ingresos reales en el marco de una problemática social creciente. A su vez, los entes municipales, en especial los pequeños, encuentran limitaciones para financiarse en el ámbito privado y para gestionar y ampliar su base tributaria, dada sus endebles estructuras de fiscalización y control condicionadas, lo que es un ingrediente adicional en los problemas existentes.
Debe mencionarse, de todos modos, que la participación de los municipios entrerrianos en la coparticipación de impuestos tiene pisos relativamente altos, que se comparan muy favorablemente con otras provincias. Ello ha llevado a que los municipios en general no hayan sufrido apremios financieros en los últimos años.
Conclusiones
El debate por la descentralización de funciones y el principio de subsidiariedad fiscal no es nuevo en Argentina. Constituye un tema de gran relevancia cuya utilidad ha sido largamente demostrada por la doctrina. Los momentos coyunturales de recesión económica ponen en evidencia justamente la urgente necesidad de avanzar en una agenda de políticas públicas que finalmente asignen a los entes locales los recursos y la capacidad de gestión suficientes para que puedan asumir con transparencia y eficacia los nuevos roles que la ciudadanía demanda y requiere. Se trata de una cuenta pendiente que lamentablemente no está presente en el debate público.
